Libro Deuteronomio Capitulo 1: 1-46
Estudio personal de la sagrada y poderosa
Palabra de Dios
1- Mensaje de Dios para hoy:
Es necesario recordar mi actitud del pasado y de los errores que ella me provocó, para poder ser más efectivo en reconocer que lo que debo obedecer no es mi voluntad, sino la de Dios.
2- Promesa de Dios para hoy:
Se cumplieron los tiempos señalados por Dios para exhortar, ahora vienen tiempos que antes fueron proféticos, hoy son realidad. (1:8)
3- Mandamiento a obedecer:
Creer en la estrategia de Dios para mi vida, eso me hará confiar en mi victoria en todo sentido. (1:29)
4- Aplicación personal:
A los 40 años salió Moisés de Egipto, sirvió cuarenta años a Dios en el desierto, y al cumplirse otros cuarenta años se cumplió la profecía de que ninguno los desobedientes entrarían a la tierra prometida, pero Moisés tampoco entro, por soberbio.
Esto me habla de estrategia del padre de los espíritus, para con sus hijos encarnados, como yo.
Porque para este momento de la vida del ya viejo Moisés, no era fácil continuar una jornada tan fuerte de vivir y gobernar el pueblo de Dios.
Sé que para yo poder apreciar y entender el propósito de Dios y asimilar el proceso, debo antes dejar de tratar de entenderlo y desde ya comenzar a aceptarlo como viene, para que así, al pasar del tiempo, yo pueda hacer como está haciendo Moisés en este capítulo, “predicando cuan grandes cosas a hecho Dios, y el porqué de la necesidad de la obediencia, la no rebeldía y la sujeción en confianza al señor.”
5- Texto Rhema:
(Deut 1:32) Y aun con esto no creísteis a Jehová vuestro Dios…
Nota: en esa media oración hay tantos que he visto, que parecen no conformarse con disfrutar de lo bueno de Dios, sino que quieren que Dios les complazca sus caprichos como si fuera por obligación.
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