Libro de Genesis Capitulo 11:1-32
Estudio personal de la sagrada y poderosa
palabra de Dios
1- Mensaje de Dios para hoy:
Los grandes hombres de Dios, comienzan a ser formados mucho antes que ellos mismos lo sospechen, ejemplo Abram.
2- Promesa de Dios para hoy:
Dios mirara las intenciones de todos aquellos que hablen el lenguaje del mundo y descenderá para confundirlos.
3- Mandamiento a obedecer:
Cuidarme de a quien escucho, que hago con ellos a donde voy, y lo más importante, la intención que ellos tienen en la quieren que yo participe. (Ge 11:4)
4- Aplicación personal:
Cuando leo la palabra de Dios y medito en ella tratando de captar lo que mi pastor una vez llamo “el espíritu de la palabra” me encuentro sumido en todo un conjunto de situaciones, donde Dios usa personas tanto buenas como malas, en este capítulo en particular y para el efecto que tendrá en este nuevo día de mi vida. Encuentro la situación que llevo a dios a confundir al hombre y su lengua, esto es; la torre de babel, me quedo asombrado como Dios interviene cuando él ve que algo que voy a hacer, no está bien, y estorbara el resultado de su voluntad en mí. Digo esto porque: viene un Abram en camino y el derrotado enemigo ha contaminado el corazón de algunos para evitar se cumpla la voluntad de Dios en mi. Pero Dios, que es poderoso y amoroso con y para su pueblo, desciende y toma acción correctiva. Es impresionante como estas cosas que sucedieron tan atrás en la historia, siguen sucediendo hoy y se han manifestado en mi vida, es como que se mantuviera la misma intención pero se cambiaron los protagonistas. Cuando aplico este capítulo a mí, me encuentro que: yo también quise construirme una torre; si, y me reunía con los que decían ser mis amigos y salíamos al los placeres del mundo. Porque era como decir: el placer es el cielo, hagamos esto o aquello y lleguemos hasta el cielo. Pero Dios, que tiene misericordia y se acuerda de mi, dijo “descenderé a él antes que sea muy tarde”.(Ge11:7) Y gracias ha ese momento cuando dios me confundió hasta transtornarme y convertirme, con esto que llamó, evangelio, y cambió mi lenguaje por el del reino, y me mudó de lugares del mundo a lugares Rhema, y empecé a ser procesado y apartado del pecado. Entonces fue cuando el hombre de Dios que estaba en mi, comenzó su vida y recibí las promesas Por esto y más, no puedo quejarme de lo que sea mi proceso, porque hay unas promesas que alcanzar y muchedumbre de gente por venir. El proceso, es el camino que debo seguir, para llegar a ellas, el proceso que Dios trazó, el camino que Cristo limpió, y lo mejor es esto: en mi proceso no estoy solo, ni en mi camino estoy solo, porque el espíritu santo de Dios me guía y consuela. Amen, amen.
5- Texto Rhema:
(Ge 11:5). Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres.
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